Existen y se dan en la realidad cierto tipo de
insolvencias y reorganizaciones "especiales", para decirlo, sin que suene
elitista y es cuando grandes empresas, que generan miles de empleos directos y otros
cientos de miles indirectos, que además es uno de los motores de desarrollo del país
generando ingreso de divisas, cae o llega a una situación no tanto de insolvencia sino de
zona roja o de peligro por sus actividades mercantiles y de expansión no controladas y
que de una u otra manera puede afectar la economía del país y como resorte a buena parte
del mundo.
Esto sucedió no hace mucho tiempo, en la crisis financiera de la llamada burbuja
inmobiliaria, en los Estados Unidos en la administración del presidente George W. Bush
(hijo), donde en aquel momento era más fácil obtener crédito para compra de vivienda
que obtener una tarjeta de descuentos de una cadena de tiendas.
En el momento en que los bancos trataron de recuperar los miles de millones que tenían
en cartera "regada" o en poder del publico y les fue imposible, pues la
generación de empleo no había ido a la par con los desembolsos hechos a los hipotecados,
el gobierno intervino a través del banco central, inyectándole capital a las principales
instituciones financieras incluidos algunos bancos.
Mas recientemente en el primer periodo del actual mandatario de los Estados Unidos; El
señor Obama, efectuó un rescate financiero al sector automotriz, siendo beneficiadas
algunas de las principales empresas ensambladoras de vehículos de marcas comercialmente
muy reconocidas en todo el mundo. |